“La brevedad...”

“La brevedad...”

“La brevedad…

efímera compañera,

es profunda intensidad...

si lentamente

se condensa

y se libera.”

"ALLI.."

“ALLI…”

Allí donde se esconde…
me escondo.

Allí donde suspira…
suspiro.

Allí donde duerme…
duermo.

Allí donde llora…
lloro.

Allí donde calla…
callo.

Allí donde el amor ama…

yo… al amor amo.

SIN ALAS...

SIN ALAS (I)

Aprendí a volar sin alas...
y mal vuelo...
pero siento el viento en mi cara...
y agito los brazos sin dolor...

Alto vuelo...
alto vuelo...
sin alas...
solo con el viento...
solo con el suave roce
del terciopelo de la flor...

Vuelo sin alas...
y con la mente...
me sostengo en el infinito...
sin miedo... sin alas... sin temor...

SIN ALAS (II)

Aprendí a soñar sin alas...
y mal sueño...
pero siento tu mano en mi cara...
y agito el pensamiento sin dolor...

Alto sueño...
alto sueño...
sin alas...
solo con el pensamiento...
solo con el suave roce
del terciopelo de tu mano...

de tu voz...

Sueño sin alas...
y con la mente...
me sostengo en el pensamiento infinito...
sin miedo... sin alas... sin sueño... sin temor.

SIN ALAS (III)

Aprendí a vivir sin alas...
y mal vivo...
pero siento tu vida en mi vida...
y agito mi vida sin dolor...

Alto vivo...
alto vivo...
sin alas...
solo con la vida...
solo con la suave dulzura
de tu frágil sentimiento...

de tu vívida vida...

Vivo sin alas...
y con la viveza...
me sostengo en el sentimiento infinito...
sin miedo... sin alas... sin vida... sin temor.

SIN ALAS (IV)

Aprendí a luchar sin alas...
y mal lucho...
pero siento tu lucha en mi vida...
y agito mi lucha sin dolor...

Lucho vivo...
lucho vivo...
sin alas...
solo con la lucha...
solo con la amorosa arma
de tu frágil lucha...

de tu luchada vida...

Lucho sin alas...
y con la lucha...
me sostengo en la lucha infinita... 

sin miedo... sin alas... sin armas... sin temor.

Aprendí a volar… a soñar

Aprendí a volar… a soñar

SIN ALAS (I)

Aprendí a volar sin alas...
y mal vuelo...
pero siento el viento en mi cara...
y agito lo brazos sin dolor...

Alto vuelo...
alto vuelo...
sin alas...
solo con viento...
solo con el suave roce
del terciopelo de la flor...

Vuelo sin alas...
y con la mente...
me sostengo en el infinito...
sin miedo... sin alas... sin temor...

SIN ALAS (II)

Aprendí a soñar sin alas...
y mal sueño...
pero siento tu mano en mi cara...
y agito el pensamiento sin dolor...

Alto sueño...
alto sueño...
sin alas...
solo con el pensamiento...
solo con el suave roce
del terciopelo de tu mano...

de tu voz...

Sueño sin alas...
y con la mente...
me sostengo en el pensamiento infinito...
sin miedo... sin alas... sin sueño... sin temor.

SIN ALAS (III)

Aprendí a vivir sin alas...
y mal vivo...
pero siento tu vida en mi vida...
y agito mi vida sin dolor...

Alto vivo...
alto vivo...
sin alas...
solo con la vida...
solo con la suave dulzura
de tu frágil sentimiento...

de tu vívida vida...

Vivo sin alas...
y con la viveza...
me sostengo en el sentimiento infinito...
sin miedo... sin alas... sin vida... sin temor.

SIN ALAS (IV)

Aprendí a luchar sin alas...
y mal lucho...
pero siento tu lucha en mi vida...
y agito mi lucha sin dolor...

Lucho vivo...
lucho vivo...
sin alas...
solo con la lucha...
solo con la amorosa arma
de tu frágil lucha...

de tu luchada vida...

Lucho sin alas...
y con la lucha...
me sostengo en la lucha infinita...
sin miedo... sin alas... sin armas... sin temor.

ME QUEDE COLGADO DE LA LUNA...

Me quedé colgado del viento

de las luces de la noche,

de las palabras de un cuento

y de los silencios del reproche…

Me quedé suspendido del dolor

de las voces calladas que trae el amor,

de las frases hechas y de las dichas

y del profundo suspiro de la flor…

Me quedé guindado del almendro

de la suave y colorida primavera,

de las fragancias y de las olores

y de la vida del ser que nada espera…

Me quedé pendiente de un hilo

de un recoser y coser,

del hilvanar de la costurera

y de su  manera de ser…

Me quedé enganchado de su rictus

de sus formas de proceder,

de su canto… si hubo canto

y de sus firmes maneras de ver…

Que me quedé…

me quedé colgado

de la luna… pardiez.

VEO AMOR... AMOR TOTAL

“VEO AMOR… AMOR TOTAL”

“Trato siempre mirar

a través del azur cristal

de los ojos extasiados…

llenos, colmados y saturados

del espontáneo amor sazonado

y del amor total simplificado…

Yo, veo amor… amor total

en ese árbol despeinado…

en esa roca enmohecida…

en esa olorosa flor iris que porfía…

por el temblor nocturno

del suave aromatizar… tiritar.

Yo, veo amor… amor total

en ese transitar sin rumbo por la vida…

en ese pensamiento fugaz calmado…

en esa alegre y profunda pena que suspira…

y en esa triste y desconsolada alegría

que nunca parecen terminar pasar.

Yo, veo amor… amor total

en ese querer ver de forma especial,

allí… donde nadie quiere ver

y donde nadie quiere pensar

que en la simplicidad de lo complicado…

en lo mínimo, nimio e inapreciable…

es dónde está presente el total amor…

allí… es donde está… el amor total.

Trato siempre mirar

a través de los ojos del amor

del que mira viendo esplendor

allí… donde nadie quiere… querer

o allí… donde nadie quiere… mirar.”

PROMITTO...

PROMITTO...

Prometo no molestar…

Prometo olvidar…

sin hacer ruido.

Respirar solo el aire

necesario para sobrevivir.

Asistir al parto del día

después de llorar

en la soledad más oscura

de la silenciosa noche.

Aguantar la respiración

cuando pase por el lado

oculto de la tristeza.

Tragar saliva

cuando vea pasar el odio

de los hombres por mi puerta,

sin rechistar… sin contestar.

Levantar la copa del olvido

y solo pensar en el futuro.

Estar contigo

cuando todos se hayan ido.

Saborear el amargor

del desprecio y con dulzor

volver a libar

el néctar del confundido.

Mirarte a los ojos

sin bajar la mirada.

Subirme a la luna

para tocar las estrellas.

Balancearme con las cuerdas

de la guitarra desafinada.

Dar calor al frio

y claridad a la oscuridad...

Volver a creer en la esperanza

que remueve al desesperado.

Sostener con resignación

el peso desproporcionado

de la injusticia.

Beber de la sinrazón

para ahuyentar al destino

del misterioso  devenir.

Remover las cenizas

de un fuego apagado

y resucitar a la llama

de la comprensión.

Buscar motivos

y encontrar razones

entre los sin motivos

y… la sinrazón.

Prometo no molestar…

Prometo olvidar…

Prometo andar silencioso

entre las nubes de algodón,

sin hacer ruido.

Respirar solo el aire

necesario para sobrevivir.

Promitto…

vobis.

NDEH